¿Sabías que tu Lavavajillas se Debería Limpiar?
Tenemos la creencia que los artículos y electrodomésticos que desempeñan tareas de limpieza no deben ser limpiados, como la aspiradora, la lavadora o incluso el lavavajillas. Este último a menudo se tapa con restos de comida y con la humedad puede generar suciedad, agua estancada, gérmenes y otros agentes que pueden ir a parar a tus utensilios que usas para comer, por lo que es muy importante limpiarlo con frecuencia idealmente de 2 a 4 veces al año. En este artículo te muestro cómo limpiar tu lavavajillas con unos sencillos pasos:
¿Qué necesitas?
Antes de comenzar, necesitas reunir todo los artículos que usarás:
Bicarbonato de sodio
Vinagre blanco destilado
Esponja
Cepillo pequeño (puede ser un cepillo de dientes)
Retire las piezas desmontables
A primera vista notarás que tu lavavajillas no está sucio, sin embargo es importante quitar todas las piezas removibles para acceder a las partes que acumulan suciedad, restos de jabón, hongos y otros agentes.
Lava todas las piezas que removiste por separado y no olvides el filtro.
Limpia las paredes internas
Una vez que haya retirado todos los artículos del interior de su lavavajillas, notarás que las paredes y los rincones pueden estar sucios. Para poder limpiarlos puedes usar una mezcla de bicarbonato de sodio y agua hasta conseguir una consistencia pastosa y la puedes aplicar con ayuda de una esponja (usa la parte suave de la esponja para prevenir rayas!) frotando suavemente por las superficies internas de tu lavavajillas.
Para los rincones de difícil acceso a los que no podrás llegar con una esponja puedes usar un cepillo de dientes que es más pequeño.
Una vez terminado este proceso puedes quitar el exceso de bicarbonato con un paño húmedo.
Extrae el agua estancada
Revisa si tu lavavajillas tiene agua estancada en algún lugar, si no extraes esto por mucho que laves tu platos y otros implementos nunca podrás quitarles el mal olor. Es posible que encuentres esta agua estancada debajo del filtro. Ayúdate con una esponja para absorber el agua y luego escurrirla en el fregadero. Repite este proceso hasta que hayas quitado toda el agua estancada al interior de tu máquina.
Volviendo todas las piezas a su lugar
Una vez que se hayan secado muy bien todas las piezas que quitamos para limpiar el lavavajillas asegúrate que calzarlas muy bien en su lugar, no olvides que este electrodoméstico funciona con agua a presión por lo que cualquier pieza que no quede correctamente fijada provocará un posible derrame de agua o incluso se corre el riesgo de dañar el lavavajillas.
Ciclo de Limpieza
Una vez que hayas terminado la rutina de limpieza es recomendable realizar un ciclo de limpieza sin jabón de lavavajillas, en su lugar puedes usar un vaso de vinagre blanco destilado. Revisa los diferentes programas de electrodoméstico y configúralo para un lavado con agua caliente y/o en un ciclo de “desinfección” en caso de que lo tenga.
Finalmente no olvides limpiar el exterior del aparato, las rendijas, huecos y espacios en donde están los botones, apóyate del cepillo de dientes para acceder a estos espacios pequeños. Si el exterior es de acero inoxidable puedes usar la misma mezcla pastosa que usaste para limpiar el interior.
No olvides estar revisando periódicamente las condiciones de limpieza de tu lavavajillas.